28 junho 2009
Juan Bonilla
Denominación de origen: extranjero
La patria es estar lejos de la patria:
una nostalgia de la infancia en noches
en que te sientes viejo, una nostalgia
que sube a tu garganta como el agrio
sabor del vino en las resacas duras.
La patria es un estado: pero de ánimo.
Un viejo invernadero de pasiones.
La patria es la familia: ese lugar
en el que dan paella los domingos.
Una patria es la lengua en la que sueñas.
Y el patio del colegio donde un día
bajo una lámina de cielo oscuro
decidiste escpar por vez primera.
Mi patria está en el cuerpo de Patricia:
mi himno es su gemido, mi bandera
su desnudez de doce de la noche
a ocho de la mañana. Tras la ducha
mi patria se va al trabajo, yo me exilio.
[in Partes de Guerra, Pre-Textos, 1994, pág. 35]
Epitafio del enamorado
Si alguien quiere escribir mi biografia
no hay nada más sencillo.
Dispone de dos fechas solamente:
la del dia en que te conocí
y la del que te fuiste.
Entre una y outra transcurrió mi vida.
Lo que ocurriera antes, lo olvide.
Lo que suceda ya, carece de importancia.
[in El Belvedere, Pre-Textos pág. 18]
Contra San Juan
Pusiste amor donde no había amor
y allí creció la flor del desengño.
Donde aguardabas oro hallaste estaño
y el entusiasmo se enquisto en sopor.
Se equivocaron De Yepes y Sor
Juana, que amor sembrado en sitio extraño
no proporciona sino antiguo daño
al que no sobrevive su esplendor.
Así que el que sembrare en un erial
su amor, no cuente com que se agigante.
Ni lo recobrará, pues, contagiado,
su corazón habrá adquirido el mal
que impide que otro amor se le trasplante.
Él mismo en un erial se ha transformado.
[in Buzón Vacío, Pre-Textos, 2006, pág. 33]
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